Cómo proyectar la voz
La voz es un proceso complejo. Los pulmones, las cuerdas vocales y los senos nasales contribuyen al tono, la calidad y el volumen de la voz, mientras que los labios, la lengua y otras estructuras de la boca controlan la vocalización. Proyectar la voz es una técnica específica que permite mejorar la calidad y el tono de la voz y que nos permite hablar alto y claro sin esfuerzo vocal.
Limitamos nuestra potencia de voz por tema de educación y miedo a “gritar” sin saber que gritar no es subir la voz, es utilizar entonaciones estridentes o tajantes.
Con la ayuda de la respiración y de algunas partes del cuerpo muy localizadas podemos utilizar 4 voces distintas: Voz de cabeza, voz de garganta (la que utilizamos siempre y que tiene poca amplitud) voz abdominal y voz de espalda.
Para trabajar estas voces nos apoyamos sobre el soplo y utilizamos el abdomen, la cabeza o la espalda para asentar la amplitud vocal y abrir la voz.
Hay que ser consciente que nuestra voz es la herramienta que nos relaciona con el mundo exterior, cada tesitura de voz es única y hace parte de nuestra identidad.
Paso 1
Respira por el diafragma. Las cuerdas vocales vibran al pasar el aire sobre ellas… cuanto más fuerte es el flujo de aire, más fuerte es el sonido. Inhala y exhala, profundamente, para aumentar el volumen de aire en tus pulmones. Con la respiración diafragmática, tu estómago debe expandirse y contraerse con cada respiración.
Pasó 2
Relaja tu cuello y tus hombros. La tensión en el cuello y los hombros dificulta el flujo de aire y limita el espacio vocal. Las cuerdas vocales necesitan vibrar juntas, pero si el espacio está demasiado estrecho, crea efecto amortiguador. Para aflojar el cuello y los hombros, mientras soplas, dejar caer los hombros hacia abajo y gira la cabeza en ambas direcciones.
Paso 3
Mantén una postura adecuada, es decir, los hombros rectos y la cabeza centrada. Las orejas deben estar alineadas con los hombros y la barbilla relajada. No subas la barbilla ni la pongas hacia delante. Evita encorvarte y mantén la columna vertebral recta y la caja torácica relajada.
Pasó 4
Imagina que tu tripa es un globo, cuando inhalas, la barriga se hincha, y cuando soplas la barriga se vacía. Haz varias respiraciones abdominales para entenderlo, esta respiración ayuda también a concentrarse. Inhala en 4 tiempos, mantén tiempos de retención de aire y sopla en 4 tiempos diciendo la letra “a”. Tu voz se va a abrir y extender sin castigar tus cuerdas vocales. El soplo llevará tu voz fuera de ti.
Paso 5
Mientras practicas este ejercicio imagina que tu voz es una pelota que lanzas hasta una pared, la pelota no debe caer a la mitad del camino, y tu voz tampoco, se mantiene alta hasta el final del soplo.
Paso 6
Mantén tu garganta húmeda manteniéndote adecuadamente hidratada. Los senos nasales están diseñados para calentar y humedecer el aire antes de que llegue a la garganta, así que inhala por la nariz, en vez de por la boca.